JESUS TUVO MIEDO

Marcos 14:32-42

Getsemaní

32.Llegaron a un lugar llamado Getsemaní, y Jesús dijo a sus discípulos: «Siéntense aquí mientras voy a orar.»

33.Y llevó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan. Comenzó a llenarse de temor y angustia,

34.y les dijo: «Siento en mi alma una tristeza de muerte. Quédense aquí y permanezcan despiertos.»

35.Jesús se adelantó un poco, y cayó en tierra suplicando que, si era posible, no tuviera que pasar por aquella hora.

36.Decía: «Abbá, o sea, Padre, si para ti todo es posible, aparta de mí esta copa. Pero no se haga lo que yo quiero, sino lo que quieres tú.»

37.Volvió y los encontró dormidos. Y dijo a Pedro: «Simón, ¿duermes? ¿De modo que no pudiste permanecer despierto una hora?

38.Estén despiertos y oren para no caer en la tentación; pues el espíritu es animoso, pero la carne, débil.»

39.Y se alejó de nuevo a orar, repitiendo las mismas palabras.

40.Al volver otra vez, los encontró de nuevo dormidos, pues no podían resistir el sueño y no sabían qué decirle.

41.Vino por tercera vez, y les dijo: «Ahora ya pueden dormir y descansar. Está hecho, llegó la hora. El Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los pecadores.

42.¡Levántense, vámonos!, ya viene el que me va a entregar.»

Un grupo de Personas estuvimos analizando este evangelio y  quisiera compartirlo con ustedes esperando que sea de bendición..

En principio nos llamo la atención que Jesús siendo un Dios-Hombre tuvo temor y angustia ante una situación difícil que le iba ocurrir, así como también nosotros  sentimos miedos  antes una situación de esta envergadura. A tal punto Jesús demostró desagrado o rebeldía por este suceso.

Jesús nos demuestra ante estas situaciones de miedos, dolor, angustia, rebeldía, debemos de realizar oración personal, y que a la vez debemos de pedir oración a un grupo de personas que estén ungidas por el Espíritu Santo para que interceda en nuestras  oraciones personales, aquí nos refleja ampliamente el poder de la Oración de Intercesión, cuando Jesús le pedía a sus discípulos que oraran por El..

Los discípulos en una oportunidad,  vieron la importancia de la oración en Jesús cuando  realizaba tantos milagros producto de su oración,  inclusive despertó la curiosidad en ellos cual sería la estrategia que Jesus aplicaría en la oración para recibir tanto poder en su mision.

Lucas 11 

Jesús Enseña sobre la Oración

11 Aconteció que estando Jesús orando en cierto lugar, cuando terminó, Le dijo uno de Sus discípulos: “Señor, enséñanos a orar, así como Juan enseñó también a sus discípulos.” ² Y El les dijo: “Cuando oren, digan:

‘^[a]Padre, santificado sea Tu nombre.
Venga Tu reino.
³ Danos hoy^[b] el pan nuestro de cada día^[c].
⁴ Y perdónanos nuestros pecados,
Porque también nosotros perdonamos a todos los que nos deben.
Y no nos metas (no nos dejes caer) en tentación.’”

En este texto bíblico Marcos 14:32-42, Jesús nos muestra otro modelo de oración, fíjense como esta estructurado:

36. Decía: «Abbá, o sea, Padre, si para ti todo es posible, aparta de mí esta copa. Pero no se haga lo que yo quiero, sino lo que quieres tú.»

1         1) Invocación al : Abbá, o sea, Padre,

        2)     Creer: si para ti todo es posible      3)

        3) Suplica: aparta de mí esta copa

         4)Sumisión o abandono : cúmplase la voluntad del Padre 

Quisiera tocar el punto 4 en estos momentos, cuantas veces estamos dormidos, soñolientos a los mandatos de Jesús, muchas veces en el fondo de nuestro corazón sabemos que Dios nos ha encargado una misión y no cumplimos  porque estamos dormidos, no tenemos tiempo y estamos ocupados con nuestros quehaceres, trabajo e hijos.

     

Nosotros como discípulos de Jesús, cuando no nos guste la prueba que estemos viviendo,  debemos de aceptarla para cumplir la voluntad del Padre y no la voluntad nuestra. Inclusive cuando esa prueba sea una enfermedad mortal física, traumas etc  y  aceptas esa situación, es el inicio para la apertura de la bendición y la sanación que estas esperando de Jesús y produzca el milagro.

Por último, en este evangelio nos muestra que Jesús nos habla con autoridad cuando dijo : «Simón, ¿duermes? ¿De modo que no pudiste permanecer despierto una hora? Nos refleja en esta interrogante como debe actuar un líder ante su equipo que le ha fallado. 
¿Yo me pregunto como líder?, ¿si mi equipo me falla a mis peticiones o mandatos,  como les hubiera respondido?, los hubiera ofendido? humillado? los castigaría, los sacaría del equipo?  o simplemente los invitaría a ellos,  a seguir adelante a pesar de nuestras fallas como lo hizo Jesús con su infinita misericordia cuando les dijo 42.¡Levántense, vámonos…
Maria Alejandra Figueira Abreu
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